Si te sentís cansado de la contaminación publicitaria tanto en el espacio intelectual como en el físico te recomendamos que te unas al proyecto squatters! El mismo consiste en una organización sin fines de lucro cuyo principal objeto es el de producir en los lectores una toma de conciencia respecto al alcance, consecuencias y objetivos de la publicidad (que más bien podríamos definir como propaganda, ya que en la actualidad esta industria tiende a vender más bien estilos de vida y modos de ser y no simplemente productos)
Creemos seriamente que la publicidad responde a los intereses de las grandes corporaciones, de este modo se logra sustentar el capitalismo. Es así que las corporaciones adquieren el poder de controlar a las masas y a los gobiernos (ya que son las corporaciones las que ponen las condiciones a los gobiernos para invertir en la economía de las distintas naciones desplazando de este modo el centro de poder). Contamos con el apoyo del director de este proyecto, el señor Julián Pellegrini, agradecemos su predisposición y dedicación e invitamos con el mayor agrado a quienes quieran unirse al proyecto.
Aquí les dejamos algunas imágenes que podrán apreciar en la página del proyecto. Además dejamos una serie de links acercá de documentales, libros y distinto tipo de información que recomendamos para quienes se sientan interesados. También les dejamos una breve reseña de qué es el proyecto squatters y cuáles son sus objetivos y el mail de contacto para quienes quieran participar. Esperamos que lo disfruten. Ojalá logremos un consumo responsable.
¿Qué es el proyecto Squatters?
Squatters es el proyecto contrapublicitario argentino, creado como una expresión sin fines de lucro, destinada a inspirar a las personas a mirar al mundo desde una perspectiva más crítica y avanzar hacia una cultura de consumo más conciente y responsable.
Es tiempo de abrir los ojos: la publicidad no es más que la expresión pública del potencial económico de ciertas empresas y las elites dominantes, el lenguaje que éstas utilizan para conducir nuestras necesidades y nuestros deseos hacia ciertos modelos de vida prediseñados, hacia niveles de consumo que posibilitan y consolidan su hegemonía, y en definitiva, hacia la perpetuación de una sociedad desigual, social y ambientalmente explotadora.
Creemos que la publicidad, tal como la conocemos, es preponderantemente propaganda ideológica, el vehículo predilecto de los poderosos para inocular una ideología, unos valores y unos estilos de vida en las sociedades, con lo que consiguen anestesiar la capacidad crítica de consumo de la gente, distraerlas y manipular sus conductas de acuerdo a sus intereses.
Las elites globalistas de poder y sus empresas trasnacionales han logrado avasallar las soberanías nacionales, corromperlas e imponer un sistema global legalizado que ya sólo existe para facilitar sus operaciones. Desde esta posición de dominio absoluto, las corporaciones se han lanzado al proyecto no sólo de controlar el poder y el dinero, sino las mentes de todos. A través de una publicidad que ya no vende productos, sino estilos de vida, y que se reproduce en todos los rincones de nuestra existencia, las multinacionales se han propuesto ocupar antes que nada el espacio mental de las personas hasta el punto de que ya no tengan capacidad de decisión autónoma.
Les pedimos su ayuda para informar y alertar a la población a cerca de estas problemáticas urgentes y los convocamos a participar del Proyecto Squatters, para unir fuerzas frente al abuso del discurso publicitario, y difundir valores y mensajes alternativos, para que se consolide en nuestra sociedad, poco a poco, una cultura crítica de consumo, de manera que salvaguardando los valores humanos, sociales y medioambientales, consigamos entre todos un mundo más justo, un mayor respeto por la naturaleza y la vida.
Objetivos del proyecto:
El objetivo amplio del Proyecto Squatters es construir una propuesta cultural alternativa frente a la incesante provocación y adoctrinamiento ideológico que ejercen las corporaciones (y tras ellas, las elites globalistas) mediante el discurso publicitario.
Una estrategia moderada y sociabilizable de resistencia apuntaría, en primer lugar, a informar a la gente el modo en que la publicidad realmente afecta nuestros estilos de vida, nuestra identidad, nuestro modo de consumo y las nefastas consecuencias sociales y medioambientales que acarrea. Esto es, desnaturalizar la mirada que se tiene comúnmente sobre la industria publicitaria y sus simpáticas producciones, para develar el proyecto político global que le subyace.
Queremos denunciar lisa y llanamente la falsedad del mensaje publicitario y mostrar la otra cara de las empresas y corporaciones.
Y cuando hablamos de la otra cara, queremos decir claramente lo que las empresas ocultan detrás de sus Brands, detrás de su mascarada publicitaria “cool”: las violaciones a los derechos humanos en países como el nuestro, donde las leyes son laxas, la corrupción empresarial y corporativa, el deterioro medioambiental y la devastación de los recursos naturales; la hipocresía y el sarcasmo cómplice de empresas, gobiernos y publicistas en las guerras y las miserias más atroces.
La verdadera toma de conciencia sobre estas problemáticas es imprescindible para poder empezar a lidiar con el problema.
En segundo lugar, creemos absolutamente necesario promover formas alternativas de consumo, responsables, menos virulentas, más beneficiosas para la comunidad. Devolver al individuo su poder como ciudadano, recordarle al consumidor que él tiene el poder de convertirse en el actor principal en la construcción de un mundo más justo y seguro. Un consumidor conciente que tengan en cuenta el cuidado de la ecología, de los recursos naturales, las condiciones de los trabajadores y a la pequeña y mediana empresa.
Pretendemos promover una postura activa, crítica y responsable hacia los productos que consumimos, facilitando las herramientas que ayuden al ciudadano a asumir su rol de consumidor político. Un consumidor que a través de sus actos cotidianos de consumo ejerza opciones políticas favoreciendo o desaprobando comportamientos empresariales que buscan la paz y la concordia o que fomentan la inseguridad y la guerra.
En tercer lugar, la estrategia de resistencia apuntaría a poder neutralizar no la competitividad y la función publicitaria en sí, sino el exceso y masividad de dichas actividades y su malestar concomitante.
Es preciso, sobre todo, que las mismas corporaciones y los publicistas tomen conciencia y se sensibilicen con estas problemáticas, y a la hora de hacer las cuentas, contemplen también - y sobre todo- el costo ecológico y el costo sintomatológico de sus anuncios. Los beneficios que deben perseguir no pueden ser sólo económicos.
Nuestra propuesta apunta a hacer que la publicidad vuelva a enfocarse en los productos de consumo y deje de ser un sistema de propaganda ideológica, hipnótica y alienante, dedicado a la construcción de estereotipos afectados y consumistas. Para esto creemos preciso restringir la producción publicitaria, y proponemos:
- Recortar el presupuesto anual que las corporaciones destinan a publicidad. De este modo es posible redistribuir el dinero de forma más equitativa, poniendo énfasis en el beneficio colectivo por sobre el corporativo;
- Legislar sobre los excesos de cantidad y calidad de la publicidad -de su efectividad-; de modo que no resulte invasiva, provocadora, contaminante ni irruptiva.
Creemos que de este modo comenzaremos a construir lo que será la “publicidad nueva” (la publicidad que necesariamente debe advenir). Una publicidad que deje de ser el motor principal de una cultura de consumo insostenible, para transformarse en la promotora de un consumo ético y responsable; una publicidad que deje de favorecer la concentración del poder en unas pocas manos, para transmitir un mensaje de respeto mutuo y equidad; una publicidad que deje de promover la desintegración de los ciudadanos al transformarlos en meros consumidores pasivos, de frívolos pensamientos, para pasar a ser una publicidad con valor comunicativo, relevante, que pondera el costo ecológico y sintomatológico de sus producciones. Así, el beneficio no será sólo económico, ni sólo para unos pocos.
Estos son nuestros objetivos. Hoy, nosotros, los que navegamos a contracorriente, somos cada vez más, y vamos por ellos.
Por: Julián Pellegrini - director del Proyecto Squatters
Documentales:
The story of stuff (subtitulado)
http://www.milinkito.com/1011/the-story-of-stuff-de-annie-leonard-subtitulado-en-espanol
La corporación (imperdible)
http://video.google.es/videoplay?docid=-9007907615315517199&ei=erwxSYjOOIWiqgLl7ZHmDQ&q=the+corporation+-+espa%C3%B1ol
Libros:
NO LOGO
http://rapidshare.com/files/222968288/NO_LOGO.pdf.html
NADIE VIO MATRIX?
Este no lo pude encontrar todavía pero estoy en eso. El libro es de Walter Graziano, si alguien sabe de dónde se puede descargar por favor aviseme, de todos modos lo sigo buscando.